miércoles, 1 de julio de 2009

Echo de menos...

Cuando era joven y salia de marcha, al dia siguiente prefería dormir a comer para recuperarme. Cuanto echo de menos esa etapa!!!! Ahora también preferiría dormir a comer pero claro, debo comer para estar en forma y dormir... pues cuando puedo que no es siempre que quiero. Ahora he intentado dormir un poco ya que mi posesión (cuanto tiempo sin llamarla asi) está dormida, pero resulta que el sueño no viene. Dentro de un rato cuando le esté dando de mamar, me dormiré con ella encima... así es mi vida.

Otra cosa que echo de menos de cuando era joven (es decir, el verano pasado) es beber alcohol. Lo que daría por una cerveza bien fría!!! ¿Y por un tinto de verano??? Ni os cuento lo que daría por un tinto. !

Ahora sueño también con bañarme en la playa. Qué placer sentir el agua fresquita!! Eso espero poder hacerlo en agosto... no pierdo la esperanza.

¿Qué echais vosotros de menos hacer que no podais ahora?

4 comentarios:

Ligia dijo...

El tiempo pasa y echamos la vista atrás. Entonces nos damos cuenta de lo que echamos de menos...
¿Como está Victoria? La cerveza dicen que produce más leche materna, o eso es mentira? Abrazos

Isamar dijo...

Hola!! ¿Qué tal la nena? Yo echo de menos no tener ninguna preocupación, vivir contenta y feliz pensando sólo en el presente, salir de fiesta los fines de semana y no necesitar apenas recuperación... Muchas cosas. La vida lleva su ritmo y cada etapa trae cosas nuevas y deja algunas atrás.

Un besito para esa niña tan bonita, y para la madre también!!

Catalina dijo...

Yo echo de menos que me cuentes toooodo sobre Victoria y sobre tu maternidad. Contenta me tienes...

Y también como tú, las cosas que no tengo.
No me quiero ni imaginar lo que debe ser no poder dormir ni cinco horas seguidas.
Y un bañito si te puedes dar, y una cerveza sin alcohol también.

Disfruta de lo que tienes.

Un besote.
Cata

Velvetina dijo...

¿Sabes lo que echo de menos por esta época?... ¡Tumbarme al sol como una lagartija sin pensar en cremas de protección, ni en cubrirme la cara con una visera, ni en pensar que mis manchas se pueden multiplicar!...
Si me pongo a pensar en el resto de los días, echo de menos despertarme por las mañanas sin pensar en responsabilidades. Echo de menos “no tener nada qué hacer”. Echo de menos pensar en mí antes que en otra persona.

Echo de menos salir a la calle con libertad, sin pensar con quién he dejado a mi hija. Echo de menos ir a depilarme sola, sin que ella me acompañe y se pelea en broma conmigo a ver quien es la primera en subirse a la camilla. Echo de menos ir de compras, quedarme con una camiseta que me guste y no discutir con ella por quien de las dos la ha visto primero. Echo de menos tener qué preguntarle dónde están mis sandalias, cuando es ella la que las lleva puestas en sus pies. Echo de menos tumbarme a solas en el sofá, sin recibir los codazos de una muchachita que es más grande que yo. Echo de menos ir en el coche escuchando Kiss fm porque debo de sintonizar los 40 principales. Echo de menos no echar ya de menos este listado de cosas que te he contado; porque ¿sabes? con el paso del tiempo te darás cuenta de que lo que ahora echas de menos por ser madre, se convertrá en el mayor tesoro que puedas poseer.

¡Cuídate!... Victoria es ya indudablemente tu victoria.

Un abrazo

Velvetina